Uno de los símbolos más importantes de Nueva York es la Estatua de la Libertad que representa la libertad y la democracia. Además, se la considera como la entrada no oficial a la ciudad que da la bienvenida a los visitantes. Fue un regalo que los franceses hicieron a los Estados Unidos con motivo del centenario de la Revolución Americana y se abrió al público en 1886 y por todo esto es uno de los monumentos más visitados del mundo.
A lo largo de este artículo te voy a explicar cuáles son las formas que hay que visitar la Estatua de la Libertad, junto con horarios, tipos de entrada y toda la información que necesitas conocer para planificar una visita bien organizada. Es hoy sin duda uno de los monumentos más famosos que debes ver en Nueva York.
Conoce la Estatua de la Libertad
Originariamente se llamó «La libertad iluminando el mundo». y fue un regalo de Francia a Estados Unidos en el año 1886 para conmemorar el centenario de la independencia estadounidense, que viajó guardada en 214 cajas en barco desde París y lo cierto es que pudo haberse levantado en otra ciudad. Algunas de las candidatas fueron Cleveland, Filadelfia, San Francisco o Boston, pero que merced a Joseph Pulitzer, se quedó finalmente en Nueva York.
La estatua tiene una altura total de 93 metros desde la base hasta la punta de la antorcha y pesa aproximadamente 225 toneladas. Está hecha de cobre, mientras que su estructura interna es de hierro y acero y se encuentra en la Isla de la Libertad (Liberty Island), en el puerto de Nueva York.
La antorcha original fue reemplazada en 1986 por una nueva totalmente reformada y sin imperfecciones. La estatua cuenta con una corona de 7 picos que representan los siete continentes y los siete mares.
Además, como curiosidad debes saber que tiene una inscripción en el pedestal en donde puedes leer parte del soneto «The New Colossus» de Emma Lazarus, que da la bienvenida a los inmigrantes que llegan a Estados Unidos. Reza la frase «Dadme a vuestros rendidos, a vuestros pobres, vuestras masas hacinadas», todo ello sobre una placa de bronce, que ha pasado a convertirse en el reflejo de los ideales estadounidenses.
Por cierto, si lo que quieres es una visita en profundidad te recomiendo estas actividades:
- Tour a la Estatua de la Libertad y Ellis Island
- Ferry a la Estatua de la Libertad y Ellis Island con audioguía
- Paseo en barco por la Estatua de la Libertad
¿Merece la pena visitar la Estatua de la Libertad?
Mucha gente se pregunta si realmente vale la pena ya que todo depende de los días que tengas para visitar Nueva York. Si bien es cierto que se puede ver a lo lejos, la mayor parte de los turistas suele querer conocer más de cerca un lugar tan conocido y uno de los símbolos de Nueva York. Muchos suelen decir que venir a Nueva York y no visitar la Estatua de la Libertad es como ir a Roma no visitar el Coliseo Romano o a París y no visitar la Torre Eiffel.
Lo primero que tienes que saber es que la estatua se encuentra en Liberty Island, por lo que solo puedes acceder por barco para visitar el monumento. Hay barcos de línea que llegan hasta ella pero lo más común es realizar una excursión organizada.
Es una visita que dura varias horas, ya que tienes la opción de visitar el Museo de la Estatua de la Libertad y puedes entrar en la estatua al nivel del pedestal o subir hasta la corona desde donde puedes tomar las mejores fotos.
En Liberty Island vas a poder visitar varios sitios interesantes:
1. Museo de la Estatua de la Libertad
En primer lugar tienes la opción de ver el Museo de la Estatua de la Libertad que está justo en la base de la estatua y en donde vas a poder profundizar sobre la historia de la estatua. Todos los que tienen entradas de acceso al pedestal o a la corona, pueden visitar este museo, incluso los que no tienen entradas para el interior también puedes visitarlo ya que está incluido en el ferry que lleva a la isla.
Es una buena oportunidad para oír la historia paso a paso de como Francia y Estados Unidos trabajaron en común para erigir este símbolo de la libertad. Así también podrás conocer más sobre el proceso que dio como resultado que la Estatua de la Libertad haya sido utilizada para representar ese ideal.
El Museo de Liberty Island explica cómo esas imágenes han ido mutando con el paso de los años, desde que la estatua fue erigida, a lo que significa para mucha gente hoy en día. Realmente es un museo interesante desde el punto de vista histórico y social, quizás si vas con niños puede hacerse algo denso, pero merece la pena visitarlo.
Pero lo mejor de todo es que puedes acceder al interior de la Estatua de la Libertad. Existen dos opciones: una de ellas es visitar el pedestal y la otra la corona.
2. Pedestal
En caso de que queras visitar el pedestal, hay que contar con que debes subir 215 escalones pero cuenta con ascensor, por lo que es fácilmente accesible para personas mayores, niños o con alguna discapacidad. Ofrece vistas impresionantes de la estatua y del horizonte de la ciudad.
Debido a la popularidad de esta atracción, es aconsejable reservar las entradas con anticipación si no quieres hacer varias horas de esperando en la cola.
3. Corona
Si quieres visitar la corona hay que subir y bajar 354 escalones por una escalera bastante estrecha, pudiendo solo subir con tu entrada, una cámara y medicamentos si los necesitas. El resto de objetos, tales como carteras o llaves se deben depositar en una taquilla de alquiler.
Los visitantes pueden subir hasta la corona para obtener vistas panorámicas de Nueva York, aunque esto requiere una reserva anticipada debido a la limitada capacidad.
En los dos casos tienen que reservar con antelación, puesto que las entradas se agotan de forma rápida. Es decir, es necesario sacar entradas para la Estatua de la Libertad de Nueva York.
4. Museo de la Inmigración
Al norte de la Liberty Island, tenemos la también famosa Ellis Island. En esta isla es donde entre los años 1892 y 1924, se le dio a doce millones de personas el ingreso a Estados Unidos como inmigrantes. Pueden verse algunos de los rostros de las personas que hicieron de este sitio una leyenda de la historia estadounidense, así como los lugares y las circunstancias en las que vinieron al país.
Una visita a su museo es de alto interés para los amantes de la historia y la sociología humana, pero de todos modos es algo que merece la pena ver.
Entradas para la Estatua de la Libertad
Estas son las formas que tienes de visitar la Estatua de la Libertad:
1. Entrada básica
Es la que te da acceso al ferry de ida y vuelta que te lleva a la Isla de la Libertad y a la Isla de Ellis. Tiene incluida una audioguía en castellano para que entiendas mejor cada uno de los lugares que visites. Vas a poder entrar en el Museo de la Estatua de la Libertad y el Museo de la Inmigración de la la Isla de Ellis.
Junto con este tipo de entrada puedes comprar una audioguía que está disponible en numerosos idiomas, en principio son el árabe, inglés, francés, alemán, italiano, ruso, japonés,mandarín y español. Estos audios pueden ser una buena manera de no tener los conocimientos de inglés suficientes para disfrutar de la visita.
2. Entrada al pedestal de la estatua
Tienes lo mismo que en la entrada básica pero además te permiten el acceso al pedestal de la Estatua de la Libertad, desde donde se pueden tomar fotos panorámicas del sur de Manhattan que son realmente alucinantes. Hay que tener en cuenta que el acceso a la estatua es bastante limitado y suelen agotarse fácilmente si no las compras de manera anticipada.
3. Entrada a la corona de la estatua
Además, de todo lo que te incluyen las entradas anteriores vas a poder subir hasta uno de los puntos más altos de la estatua como es la corona. Ten en cuenta que la corona es un espacio muy pequeño en el que caben muy pocas personas, por lo que este tipo de entrada se agota con varios meses de antelación, por lo que es imprescindible hacer la reserva por Internet.
4. Tour a la Estatua de la Libertad y Ellis Island
Sin duda es la mejor de las opciones, ya que es un tour guiado por un guía experto que habla en español e inglés y que te irá diciendo en todo momento lo más interesante de cada uno de los lugares que visites. Incluye el ferry hasta las dos islas además de la entrada al museo de la estatua y al museo de la inmigración.
Te explican de forma general la historia de la isla y de la estatua, así como muchos detalles de su historia, construcción y restauración durante estos años. Quizás es la mejor opción para enterarse y siempre puedes hacer alguna pregunta que consideres interesante sobre el tema. Una excursión muy recomendable y que volveríamos a hacer sin ninguna duda.
5. Entrada Hard Hat
Esta entrada es un poco diferente a las anteriores porque se enfoca principalmente a explorar la isla de Ellis. Incluye todo lo de la entrada básica y hay que sumarle un tour guiado de hora y media al Hospital del Inmigrante, un lugar en ruinas con una gran historia a sus espaldas.
Además, podrás entrar en la exposición Unframed de Ellis Island y tiene un precio aproximado de unos 60 dólares.
¿Se puede ver la Estatua de la Libertad gratis?
La visita completa a la Estatua de la Libertad te va a llevar como mínimo unas 5 horas. En caso de que no quieras estar tanto tiempo o no quieras gastar nada de dinero, puedes hacer el ferry gratuito a Staten Island que además de pasar por la Estatua lo hace por más sitios.
Vas a pasar por delante de la Estatua de la Libertad, pero ten en cuenta que no vas a poder bajarte en Liberty Island. Este método es gratuito y no vas a necesitar descuentos de tu tarjeta New York City Pass ni nada parecido.
Recomendación, reserva con tiempo
En caso de que quieras visitar las dos islas y ver todos los sitios interesantes, lo mejor es que tengas el suficiente tiempo para poder ver todo sin que tengas que ir a toda prisa. Debes tener en cuenta que necesitarás del orden de 4 o 5 horas para ver todo en condiciones.
En caso de que visites la Estatua de la Libertad, lo mejor es que planees tu día con bastante anticipación. Si es la primera vez que vas, te darás cuenta que la visita tiene más cosas que solo mirar la propia estatua. Existe un número limitado de gente que tiene acceso a las visitas, por lo que reservar con anticipación, es una garantía de que vas a poder entrar a todas las áreas que quieres ver.
Al ser una isla muy pequeña y el acceso al interior de la estatua tan restringido se agotan las mejores entradas muy deprisa. Mi recomendación es que te hagas con las entradas lo antes posible y nunca esperes a estar en Nueva York para comprarlas.
¿Cómo llegar a la Estatua de la Libertad?
El tour que te acabamos de mencionar consiste en una visita guiada en la que no tienes que preocuparte por el transporte porque sólo tienes que seguir las instrucciones del guía. En cambio, en el resto de entradas debes saber que está incluido el ferry que te lleva a la isla y eres tú el que debes organizar el trayecto hasta la estatua.
Solo hay una forma de visitar la Estatua de la Libertad y el Museo de Ellis Island, que es mediante los ferrys operados por la empresa Statue Cruises.
Se puede subir al ferry desde dos ubicaciones:
- La primera es desde el lado del puerto de Nueva York en el muelle de Battery Park, que está en el extremo sur de Manhattan.
- Del otro lado de Jersey, se puede subir al ferry desde el Liberty State Park en Jersey City.
Los horarios exactos de los ferrys desde ambos puertos los puedes consultar desde el sitio web oficial de Statue City Cruises.
Esta es la única forma para llegar a la isla, puesto que no se permite que las embarcaciones privadas amarren en el muelle por ninguno de los dos sitios. Lo mejor es tomar transporte público para llegar al ferry en los muelles de Manhattan, puesto que aparcar en ese área suele ser muy difícil y caro, especialmente de no estar familiarizado con el tráfico neoyorquino.
Usar los transportes públicos del lado de Jersey, es más fácil que conducir o tomar un taxi. Para conocer las opciones de transportes públicos en cada ubicación, visita la página de transporte del Servicio National Park.
Los ferrys salen cada media hora aproximadamente, empezando a las 9:30 de la mañana y hasta las 5:00 de la tarde todos los días del año.
El trayecto hasta las islas no tarda más de 10 minutos. Tengas planeado visitar la Estatua de la Libertad allí o no, necesitarás bajar y subir en otro ferry hacia Ellis Island. Aquí vas a poder pasar como mínimo una hora si quieres recorrer el museo. Hay que asegurarse de subir al ferry correcto cuando abandones Ellis Island al final de la jornada.
En caso de subir al ferry incorrecto, podrías terminar de nuevo en Liberty Island, o en el peor de los casos en un estado diferente.
Consejos para visitar la Estatua de la Libertad
Los mejores días para evitar las colas son de lunes a jueves y a primera hora de la mañana, ya que cuanto más tarde más turistas van llegando a la isla. Ten en cuenta que es una visita bastante larga que puede extenderse a las 4 horas, y en caso de querer subir al pedestal y la corona puede ser una hora más.
En cuanto a la seguridad, antes de subir al ferry y entrar en la estatua tendrás que pasar un control parecido al de los aeropuertos, por lo que debes llevar tu DNI. Además, para subir al pedestal y la corona no podrás hacerlo con mochilas, por lo que tendrás que dejarlas en las taquillas que hay en el control de seguridad.
La mejor forma de aprovechar el paseo en barco es quedarte fuera en la planta superior, desde donde podrás hacer las mejores fotos de la Estatua de la Libertad.
Al ser una visita larga, debes llevar algo de comida y bebida porque en las islas hay muy poca oferta y todo lo que hay tiene unos precios muy altos. Además, si vas a subir a la zona de la corona tienes que saber que suele hacer bastante calor en un sitio tan pequeño, por lo que debes ir con ropa ligera que no haga que acabes sudando.
Por cierto, si has comprado las entradas por Internet como te he recomendado deberás cambiarlas por tickets físicos para poder entrar en la estatua.
Liberty Island
Liberty Island es la isla donde se encuentra la estatua de la Libertad, uno de los símbolos más importantes del país. Es una visita que no debes perderte, sobre todo si haces un viaje a Nueva York de 3 días o una semana.
Si quieres visitar la Estatua de la Libertad, hay que ir en barco desde Lower Manhattan en NY hasta la isla. Donde después de desembarcar vas a caminar hacia la Estatua de la Libertad. Antes de que entres en el monumentos, todo el mundo tiene que pasar por un control de seguridad estricto, muy similar al del aeropuerto.
Hay que tener en cuenta que tienes que depositar bolsas grandes, carritos, mochilas u otros objetos grandes en las taquillas de Liberty Island. El precio es de un par de dólares.
Cuando termines la visita, puedes subir en cualquier barco para volver al punto de partida. Debes tener en cuenta que el barco siempre para en la Ellis Island, donde vas a poder bajar si quieres, sin tener que pagar dinero extra por la visita. En caso de que no quieras visitar Ellis Island, puedes permanecer en el barco y te devolverá a Manhattan.
Ellis Island
Una vez hayas acabado de ver la de la Estatua de la Libertad es momento de volver al puerto y coger el ferry que lleva a Ellis Island. Es decisión tuya bajarte para verla o seguir en el barco para llegar a tierra firme y acabar el tour en Manhattan.
En caso de que quieras explorar esta segunda isla tienes que saber que tiene varios puntos interesantes y que complementan lo que ya has visto en Liberty Island. Aquí tienes algunas de las cosas que te recomiendo ver:
Museo Nacional de la Inmigración
Este lugar se dedica a preservar y contar la historia 12 millones de inmigrantes que pasaron por esta lugar en busca de una nueva vida en América, ya que esta isla fue la principal puerta de entrada a Estados Unidos durante mucho tiempo.
Dentro del museo podrás encontrar exposiciones interactivas sobre la inmigración y como curiosidad podrás buscar en la base de datos de los registros de inmigrantes para encontrar información sobre esas personas.
Hospital del Inmigrante
Es un hospital abandonado y en ruinas en la zona sur de la isla, un lugar donde acababan las personas con enfermedades que había que poner en cuarentena. Conocerás las historias de los inmigrantes que acabaron en este lugar, todo ello rodeado del encanto de estar en un edificio totalmente destrozado por el abandono y el paso del tiempo.
Sólo puedes verlo por dentro si te apuntas a los llamados Hard Hat Tours, que suelen tener un importe algo elevado, pero que merece la pena si tienes tiempo suficiente para estar en la isla.
Lo mejor es comprar el New York Pass o el New York CityPass o el Explorer Pass, los tres incluyen esta visita.
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